NICARAGUA: AFECTACIÓN POR LA PANDEMIA

La incidencia del coronavirus en Nicaragua, si nos atenemos a los datos oficiales, ha sido baja comparada con otros países de su entorno. Si bien es cierto que existen dudas sobre la rigurosidad de los datos oficiales suministrados por la administración nicaragüense, el país ha funcionado con relativa normalidad durante todo este periodo, no se han tenido que imponer medidas estrictas de confinamiento y tanto las instituciones públicas como la mayoría de las empresas privadas se han mantenido abiertas. Esto se ha debido en gran medida al trabajo permanente del Ministerio de Salud que tiene como fortaleza un Modelo de Salud Familiar y Comunitario que ha promovido la identificación, la captación, la atención y el tratamiento de los casos en el mismo domicilio de las personas afectadas.

Nicaragua es un país “acostumbrado” a sufrir epidemias, por lo que dispone de unos protocolos de actuación muy bien asimilados por los profesionales sanitarios y población en general. No obstante, la actividad económica de Nicaragua se ha visto afectada por la crisis internacional, principalmente el sector turístico por la disminución drástica de llegada de visitantes al país.

En relación a los proyectos que Familias Unidas desarrolla en este país con sus distintos socios, en líneas generales se han visto poco afectados por la pandemia y se han podido ejecutar con relativa normalidad.

Sector Educación

La actividad principal en este sector, la entrega de material escolar, no se pudo completar por las restricciones en cuanto a la congregación de personas. Por el contrario, el proyecto de la “Universidad en el campo” ha podido completar el curso académico. Hay que tener en cuenta que la afectación de la pandemia en el área rural ha sido muy escasa, lo que ha facilitado el desarrollo de todas las actividades en las comunidades.

Sector Salud

La Cooperativa Multifuncional Salud para Todos ha podido llevar a cabo proyectos tan importantes como la instalación de unidades sanitarias para la mejora del saneamiento domiciliar o la mejora de sistemas de abastecimiento de agua en comunidades rurales. Solo las actividades con un componente formativo como talleres y capacitaciones, han tenido que modificarse para evitar la aglomeración de personas.

Desde el proyecto de brigadas urbanas de salud y mejora ambiental en cinco barrios de Estelí, se ha apoyado al MINSA en la compra y entrega de material de reposición periódica para luchar contra la pandemia.

Hay que destacar que el Centro de Salud ha continuado brindando consulta médica durante todo este tiempo y su funcionamiento y horario se ha adecuado para no concentrar a los usuarios. También se han mantenido las visitas médicas y abastecimiento de comedores escolares en el área rural. Desde aquí queremos agradecer el esfuerzo realizado por el personal sanitario de nuestro socio en Nicaragua que han cumplido con esa labor de atención a la población a pesar del riesgo de contagio.

Sector Producción

La Cooperativa CODEAGRO ha visto más limitada su actividad a causa de la pandemia. Todas las actividades de seguimiento y atención personalizada a las pymes tuvieron que paralizarse y se facilitó que los empleados pudieran hacer teletrabajo.

El personal dedicado a la actividad productiva agropecuaria mantuvo sus labores. Se dio atención a productores para la siembra de plántulas en el invernadero y se llevó a cabo el seguimiento de proyectos de mejora de sistemas de riego.

El problema principal de la población atendida ha sido el impacto de la pandemia en sus economías. La agricultura ha vivido una inestabilidad de precios que ha repercutido en una bajada importante de los ingresos de los productores. En la ciudad, las pequeñas empresas han experimentado una bajada de ventas de sus productos y prestación de servicios, problemas de abastecimiento de los productos que venden o necesarios para sus actividades económicas, mayores requisitos para solicitar créditos o falta de recursos económicos para adquirir equipos y materiales de protección para atender adecuadamente a sus clientes y evitar la propagación de la enfermedad.

En este sentido, en Familias Unidas ya estamos trabajando en nuevos proyectos que tienen como principal objetivo reactivar las pequeñas empresas para que puedan mejorar su posicionamiento en el mercado y aumentar las ventas.

REVISTA 40 – ENERO 2021

En definitiva, nuestro trabajo en Nicaragua ha podido continuar activo a pesar de la pandemia y afrontamos 2021 con nuevos retosque contribuyan a paliar los efectos negativos vividos en 2020.